La negativa de Política Territorial a ceder al Concello el tramo de la PO-531 desde A Barca a Campañó llevó ayer a los vecinos de la zona a dar un tirón de orejas a los tres grupos políticos pontevedreses con representación municipal. Manuel Corredoira, presidente del colectivo vecinal, aseguró que PSOE, BNG y PP «non teñen poder» en la Xunta.
Vecinos de la zona se mostraron decepcionados con los políticos locales y lamentaron que Pontevedra «non ten peso político ningún en Galicia a pesares de ter 80.000 habitantes». «Quere dicir que os nosos políticos e os tres grupos non pesan nada», dijo Corredoira.
Los tres grupos políticos se habían comprometido en entrevistas con el colectivo vecinal a respaldar y trasladar a la Administración Autonómica la petición de que los 2,5 kilómetros que separan A Barca de la rotonda del periférico de Poio, en Campañó, pasasen a ser propiedad municipal para dar al trayecto un tratamiento urbano.
Ayer, tras conocer las declaraciones de la delegada de Política Territorial contrarias a la transferencia del vial hasta que no se construya la autovía A-57, los vecinos se mostraron desencantados con los grupos políticos. «Deberían -dijo Corredoira- comenzar a protestar todos. Se, como manifestaron os tres grupos, todos queren que a entrada a Pontevedra se ceda ao Concello, o sucedido quere dicir que non teñen poder na Xunta».
«Eles son os representantes das 80.000 persoas e terán que empezar a presionar», dijo el líder vecinal, quien deseó expresamente que los partidos «se mollen» ante la negativa al traspaso de la PO-531 y recordó que el PSOE está también en el bipartito municipal.